La Madre
Te refieres a la poesía que me dedicaste, ¿no? ¡Qué quieres que te diga! Creo que nunca le habrán dedicado a una suegra una poesía parecida el día de la boda de su hija… El pelícano que alimenta a su hijos con su propia sangre…, ¿sabes que lloré?…, sí…